Novena a San Vicente de Paúl 2022

Novena a San Vicente de Paúl 2022

Presentamos con mucho gozo la edición 2022 de la Novena a San Vicente de Paúl, titulada POR LOS CAMINO DE SAN VICENTE, la versión ilustrada solo esta disponible en pdf que lo puedes descargar a continuación y totalmente gratis.

PRESENTACIÓN

“Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible” (1 Cor, 9, 25). Este año la edición de la novena nos invita a recorrer los pasos de San Vicente de Paúl, por lo lugares donde él vivió, estudió, evangelizó y trabajó.
Conoceremos la Francia de esa época, sentiremos un verdadero peregrinar por aquellos pueblos y ciudades donde San Vicente ejerció su apostolado misionero.
Adentrémonos en esta aventura de nueve días, disfrutando de las meditaciones, de los signos, pero sobre todo del fervor del pueblo sencillo que celebra con gozo la fiesta del Patrono de las obras de caridad en la Iglesia Universal.
Invito a todos a que este año la novena a San Vicente de Paúl sea un espacio de encuentro con los hermanos y hermanas que viven en las periferias de nuestras comunidades y ciudades, llevemos hasta esos hogares sencillos y pobres la novena, recemos con ellos, anunciemos a aquellos que nunca han oído hablar de nuestro carisma vicentino, la alegría de servir a Cristo en la persona de los más pobres.
Este año la novena además de ubicarnos todos los días en una ciudad o pueblo diferente, nos invita también a salir en busca de los pasos de san Vicente que nos convoca a encontrar maneras siempre nuevas e inventivas para hacer arder la caridad en los corazones de los hombres y mujeres de nuestro tiempo.

Andrés Felipe Rojas Saavedra, CM
Párroco del Santo Cristo de Guaranda
www.corazondepaul.org

Para iniciar esta peregrinación te invitamos a llevar en tu morral los siguientes elementos:

La Palabra de Dios, que es la brújula de los caminantes de Jesús, en ella escuchamos la voz del Pastor que nos lleva a pastos seguros.

El Mapa de Francia del siglo XVII, necesarios para ubicarnos histórica y cronológicamente en los espacios donde San Vicente vivió.

Unas sandalias y un bastón, para ponernos en camino siguiendo el mandato de Cristo de ir a todo pueblo y nación.

¿Tienes todo listo? Perfecto, te invitamos a iniciar con nosotros esta peregrinación de nueve días por los caminos de San Vicente. ¡Vamos!

Aprobación:
P. Diego Luis Vásquez Marín., CM
Superior provincial- Colombia

Reflexiones:
P. Marlio Nasayó, CM (Días 3 y 4); P. Carlos Arley Cardona, CM (Día 7); P. Andrés Felipe Rojas, CM (Días 2, 8 y 9); Seminaristas: Oscar Betancourt, CM (Día 1) y Diego Aguilera (Días 5 y 6)

Corrección:
P. Carlos Arley Cardona S., CM

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

¡Oh Dios, padre amoroso! Que por tu gran bondad nos has llamado a ser Evangelizadores de los pobres, siguiendo los caminos de tu Hijo amado Jesucristo, ayúdanos con el ejemplo de San Vicente de Paúl, a ser diligentes y audaces ante las necesidades de nuestros hermanos, con un corazón sensible ante las viejas y nuevas pobrezas.

Concédenos ese Espíritu Santo, que nos hace capaces de anunciar y ser testigos del Reino de Dios en todos los lugares del mundo, para que ninguna periferia se prive del anuncio gozoso de la salvación.

Que al contemplar a tu Hijo hecho carne y presente hasta el día de hoy en medio nosotros, podamos pasar de la mesa del altar a la mesa de los pobres, para compartir con quienes representan a tu Hijo, el mensaje liberador que nos hace hermanos y hermanas hijos y caminantes en busca de la paz y el amor que solo tú Padre nos das. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

ORACIÓN A SAN JOSÉ del Papa francisco

Salve, custodio del Redentor y esposo de la Virgen María. A ti Dios confió a su Hijo, en ti María depositó su confianza, contigo Cristo se forjó como hombre.
Oh, bienaventurado José, muéstrate padre también a nosotros y guíanos en el camino de la vida. Concédenos gracia, misericordia y valentía, y defiéndenos de todo mal. Amén.
Padrenuestro.

ORACIÓN A LA VIRGEN. (De los escritos de San Vicente de Paúl)

Santísima Virgen María ayúdanos a estar dispuestos a practicar las máximas evangélicas, te pedimos que llenemos de ellas nuestro espíritu, llenemos nuestro corazón de su amor y vivamos en consecuencia. Por tu intercesión ya que, mejor que ningún otro, penetraste el sentido de esas enseñanzas y las practicaste. Para esperar que, al vernos aquí en camino de vivir según estas máximas, nos serán favorables en el tiempo y en la eternidad. (cfr. XII, 114-129)
¡Oh, Santísima Virgen, pide al Señor este favor, pídele una verdadera pureza para nosotros, para toda la familia vicentina! Esta es la súplica que te hacemos. (cfr. XI, 447-449). Amén.
Dios te salve…. Gloria

Se dice el día correspondiente

GOZOS

“San Vicente de Paúl, enciende en nosotros
el fuego de la caridad”

Fuego de la caridad, desde el campo a la ciudad,
como campesino o preceptor; de misionero a fundador.
La llama ardiente de tu celo, nos invita a la amistad
Con esclavos y afligidos dando con ardor un amor abrazador.

En el horizonte nos invitas a fijar mirada,
amor efectivo reclaman los pobres.
que sea nuestra caridad inventiva y cimentada
para dar con pasión y celo a Cristo Pan de Vida.
¡El pueblo muere de hambre y se condena!
Urge llevar el pan con justicia,
que sólo por nuestro amor
los pobres nos perdonarán

Padre de los pobres, predicador infatigable
del celo por las almas compártenos ejemplo;
para dar a los pobres testimonio fiable
que conduzcan al hombre a verdadero templo

¡Oh Vicente de Paúl! Que no se halle en nosotros
un amor que sea subjetivo, ¡donativo debe ser!,
con el esfuerzo de nuestros brazos,
y en la frente el sudor, para dar a conocer al prójimo
el amor de nuestro Dios.

Tus hijos e hijas llevan con pasión tu heraldo,
en el firmamento luz ponderosa de tu amor nos guía
con la fuerza imperativa de amar sin miedo,
a quien desde la cruz con amor nos mira.

Misión y Caridad son las alas
que te llevaron al cielo,
a tu entrada, pobres y ricos te esperaban.
Gozosos tus hijos, mientras Cristo te coronaba
de laureles y santidad, padre y apóstol,
la Iglesia en ti se reflejaba.

ORACIÓN FINAL
AL CORAZÓN DE SAN VICENTE DE PAÚL

Oh Corazón de San Vicente que sacaste del Sagrado Corazón de Jesús, la caridad que tú derramaste sobre todas las miserias morales y físicas de su tiempo, alcánzanos de jamás dejar pasar a nuestro lado miseria alguna sin socorrerla.
Haz que nuestra caridad sea respetuosa, delicada, comprensiva, efectiva como fue la tuya. Pon en nuestros corazones una fe viva que nos haga descubrir a Cristo sufriente en nuestros hermanos desventurados.
Llénanos del celo ardiente, luminoso, generoso que jamás encuentre dificultad alguna en servirlos. Te lo pedimos, oh Corazón de Jesús por la intercesión de aquel, cuyo corazón no latía ni actuaba más que por impulso del tuyo. Amen

PRIMER DÍA
Pouy- 1581

 Signo: imágenes que reflejen el campo, la casa de San Vicente de Paúl, algunas ovejas o imágenes referentes a la familia. 

Toma tu mapa empezamos esta peregrinación en Pouy la tierra que vio nacer a San Vicente de Paúl y que hoy se llama como él. Un pequeño caserío de Ranquines, en la parroquia de Pouy, diócesis de Dax, villa episcopal situada en los confines de Las Landas de Burdeos.

 Canción: Iba por las calles

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto: Mt 13, 31-32

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: “Os hablaré con mayor gusto todavía de las virtudes de las buenas aldeanas a causa del conocimiento que de ellas tengo por experiencia y por nacimiento, ya que soy hijo de un pobre labrador, y he vivido en el campo hasta la edad de quince años. Además, nuestro trabajo durante largos años ha sido entre los aldeanos, hasta el punto de que nadie los conoce mejor que los sacerdotes de la Misión”

(IX/1, pág. 92).

La vida de San Vicente se empieza a forjar en una familia campesina; sus padres Juan de Paúl y Beltrana de Moras eran agricultores y cuidaban animales, estaban expuestos a las fatigas y a la exigencia del campo. Allí aprendió a ser un hombre de acción, de sentido práctico y amor efectivo. San Vicente fue un hombre formado en las duras leyes de la tierra, un hombre que contaba con la clemencia del cielo, pero también con el valor de sus brazos, de ahí que uno de sus escritos dijera: «amemos a Dios, hermanos, amemos a Dios, pero que sea a expensas de nuestros brazos y del sudor de nuestras frentes».
Gracias a sus primeros años en el campo, San Vicente se forma en una fe práctica, de acciones, de una existencia comprometida en bien del otro. Para él la verdadera fe se expresa en acción, en llevar un plato de sopa a la mesa. Como campesino aprendió a estar vigilante del cielo y la tierra, es decir, que sus horas de plegarias no las separó de las horas de trabajo.

San Vicente se educó en las leyes de la caridad que en un ambiente campesino se pueden ver: la hospitalidad, el compartir los alimentos, la generosidad entre vecinos, es decir, el amor vivido en acciones concretas. Inspirado en lo que en su niñez vivió, más adelante presentará el retrato que hará de las Hijas de la Caridad, mujeres campesinas, comprometidas en el servicio.

Preguntas:

 ¿Cuáles son mis orígenes y soy capaz de valorar la casa y la familia en la que nací y crecí?
 ¿Qué descubrió san Vicente en su familia?
 ¿Qué características tenía la región donde nació san Vicente?

SEGUNDO DÍA
Dax- 1594.

Signo: Algunos libros, que representen la academia, el estudio universitario, imágenes de maestros o de misioneros dando clases.

Vamos con ánimo alegre y paso decidido, esta vez San Vicente ha salido de su pequeña aldea, hacia la ciudad de Dax a 163 kilómetros, caminando o a paso de caballos unas 30 horas. Vicente ha dejado con gusto los zancos y los animales en el pueblo para coger los libros. Es aplicado y progresa.

 Canción: El Corazón de San Vicente de Paúl

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto Mt 13, 24-30

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: «Me acuerdo de que cuando era muchacho, cuando mi padre me llevaba con él a la ciudad, como estaba mal trajeado y era un poco cojo, me daba vergüenza ir con él y reconocerlo como padre. ¡Miserable de mí! ¡Qué desobediente fui!” (XI, 693).

Un pequeño joven campesino que recién deja a sus padres y hermanos y se adentra en el mundo de la educación, es un joven valiente, quizá mucho más valiente que jóvenes y niños de hoy en día que sienten miedo de salir de sus casas para encontrarse con un mundo mucho más grande que ellos. Dax, una ciudad muy cerca al mar, está llena de comodidades y de un ambiente muy distinto al de una pequeña villa francesa de donde viene nuestro joven Vicente de Paúl

Sus biógrafos nos dicen que Vicente es una persona aplicada en el estudio, y es en Dax donde conoce al Sr. Comet, un juez de su ciudad natal, y que era cercano a su familia, él viendo las cualidades de nuestro joven santo, lo respalda económicamente en sus estudios y le permite ser el instructor de sus hijos para de este modo ayudarse en la financiación de sus estudios.

Pero su paso por este mundo, un poco más acomodado, lo lleva a una de su crisis más profunda, lo hace sentirse avergonzado de su pobre y anciano padre, y desear una vida llena de comodidades y seguridades pasajeras. ¿Perderá el camino? ¿Qué pasara con Vicente en este camino? Sigamos avanzando día a día buscando su encuentro definitivo con los pobres.

Preguntas:

 ¿Qué más sabemos de este momento de la vida de San Vicente de Paúl?
 ¿Qué creemos que pueda pasar con San Vicente si se sigue sintiendo avergonzado de sus orígenes?
 ¿He sentido miedo de salir de mi ciudad o de mi pueblo para conocer lugares nuevos o experiencias nuevas?

TERCER DÍA
Zaragoza y Toulouse – 1597-1599

Signo: Se puede emplear el mismo signo del día de ayer, agregando algún camino o sandalias que indiquen un camino y las banderas de Francia y España o algunas imágenes representativas a estos dos países.

No te canses sigue tomando tu equipaje ligero y avancemos, hoy haremos un recorrido de cerca de 270 kilómetros más al sur, llegando al país de España, a una ciudad muy cerca de Francia, pero no te pierdas del camino, volveremos a Francia para llegar a Toulouse a 400 kilómetros de distancia. En 1598 su papá muere pero pide a sus familias que no escatimen recursos para continuar dándole estudio a su hijo Vicente.

 Canción: Vicente de Paúl eres un hombre para hoy

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto 1 Corintios 1, 26 – 31

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: Es la continuación de la obra de Jesucristo y, por tanto, el esfuerzo humano lo único que puede hacer aquí es estropearlo todo, si Dios no pone su mano. No, padre, ni la filosofía, ni la teología, ni los discursos logran nada en las almas; es preciso que Jesucristo trabaje con nosotros, o nosotros con él; que obremos en él, y él en nosotros; que hablemos como él y con su espíritu, lo mismo que él estaba en su Padre y predicaba la doctrina que le había enseñado: tal es el lenguaje de la Escritura.

(XI A pág. 236)

Desde su tierna infancia Vicente fue muy inquieto, primero en sus andanzas con las ovejas por pastos y pantanos en Pouy y sus alrededores. Ya inmerso entre los libros, parte para Zaragoza, en Aragón, en la limítrofe España y es muy probable que su estancia en las aulas universitarias no abarcara más que el año 1597, pues muere su padre en febrero de 1598, lo que precipitó el regreso a su patria. Va a Toulouse, y allí concluyó sus siete años de estudios teológicos en 1604.

Todos estos estudios lo formaron bien, Vicente profundizó en la filosofía, la teología, la Sagrada Escritura, el derecho canónico, la historia de la Iglesia…Nuestro futuro santo no fue un sacerdote ignorante, fue bien formado, pero nunca llegó a ser un intelectual puro, encontramos en él la ciencia sabiamente fusionada, con su experiencia práctica de gascón y campesino.

Nunca llegó a imaginarse nuestro futuro santo, que la seriedad de sus estudios lo llevaría a trabajar y aterrizar tanta doctrina en la formación del clero, de sus misioneros, de sus hijas y de todo un ejército de almas que beberían en el futuro, de la sabia de su vida y doctrina. Sí, los caminos de Dios no son nuestros caminos.

Preguntas:

 ¿De qué manera hoy san Vicente me enseñó a valorar la formación que recibo?
 ¿Cómo hemos de conjugar la ciencia humana con la sabiduría de Dios?
 ¿Para el servicio de Dios qué es lo que más hemos de profundizar?

CUARTO DÍA
Chateau-I’Eveque – 1600

Signo: Imágenes alusivas al sacerdocio, un cirio o una vela, la imagen de una ordenación sacerdotal.

Vamos subiendo, San Vicente nos lleva ahora al lugar donde recibió su ordenación sacerdotal a la edad de 19 años, en este lugar inicia su ministerio sacerdotal, pero nos esperan grandes aventuras, hemos caminado 219 kilómetros, son cerca de dos días de camino.

 Canción: Nada puedo por mi mismo.

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto 1 Tim. 1,12

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: Hermanos míos, cuán elevado será el oficio de los eclesiásticos por encima de las demás dignidades de la tierra, incluso de la realeza, y cómo tenéis que concebir un alto aprecio de los sacerdotes, cuyo carácter es una participación del sacerdocio eterno del Hijo de Dios, que les ha dado el poder de sacrificar su propio cuerpo y de darlo en alimento, para que los que coman de él vivan eternamente.

(XI A pág. 403)

No deja de inquietarnos el que el joven Vicente con sólo 19 años recibiera en Tarbes, muy cerca de su casa el subdiaconado y el diaconado en 1598, y en medio de sus estudios no terminados, marchara a una lejana diócesis, Périgueux, distante de su casa y de los suyos, y allí en Chateau l’Eveque, en la capilla de la residencia campestre del obispo, Monseñor Francisco Bourdeille, fuera ordenado sacerdote por este anciano obispo.

Sean como hayan sido las motivaciones del joven Vicente, lo encontramos ya ordenado en 1600, para siempre sacerdote del Dios Altísimo, sacerdote para la eternidad. Se inicia aquí el peregrinar de un sacerdote, que no tenía las convicciones profundas de tan alto ministerio. Es un sacerdote con motivaciones muy humanas, diríamos hoy, con un “ideal arribista”, en expresión de él “buscaba un honroso retiro”, con una vida muelle, anhelando “ser servido y no servir”. Hasta ahora, encontramos un santo que no quería ser santo…

Pero el Señor que “escribe recto en líneas torcidas”, con su sabiduría, lo va a ir purificando para que en el futuro no lo conozcamos, como Vicente de Paúl, sino como San Vicente de Paúl. La obra de la gracia de Dios, cuántas sorpresas nos va dando en el peregrinar de la vida.

Preguntas:

 ¿Qué posibles motivaciones llevaron a San Vicente para ser sacerdote?
 ¿Cómo viviría San Vicente hoy su sacerdocio?
 ¿Cómo animar hoy a los jóvenes para qué sean sacerdotes misioneros?

QUINTO DÍA
Túnez – 1605

Signo: Alguna embarcación, imágenes de África o de un puerto, algunas imágenes de esclavos.

En 1605, Túnez, es el país más pequeño del norte de África, y limita marítimamente con Europa. En el siglo diecisiete, consecuencia de diferentes guerras y conquistas, habitaban allí gran cantidad de turcos y musulmanes que se especializaban en la compra y venta de esclavos cristianos; estos eran retenidos de diversas formas, especialmente en los asaltos a barcos y navíos. Pero, ¿por qué motivo San Vicente se encontraría en tan poco tiempo en un país africano, sin previo aviso y embarcado en un viaje lleno de peligros?: El cautiverio y la esclavitud, una gran prueba para el joven sacerdote en aquella época.

 Canción: Por los caminos de Vicente

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto 2 Cor. 1, 3-4

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: Así pues, mi estado en una palabra es tal que estoy en esta ciudad de Roma, donde continúo mis estudios, mantenido por monseñor el vicelegado que era de Aviñón, que me concede el honor de estimarse y de desear mi ascenso, por haberle enseñado muy bellas cosas curiosas que aprendí durante mi esclavitud con aquel viejo turco a quien, como ya le escribí, había sido vendido.

(I pág. 85)

Como muchos otros cristianos que habitaban tierras europeas y se embarcaban mar adentro para desplazarse de un lugar a otro, San Vicente se vio frente a la gran prueba del cautiverio y la esclavitud, no se imaginaba el joven sacerdote francés que por desplazarse para recibir una herencia otorgada por una buena mujer en Castres (población francesa), y luego a su regreso, seria asaltado por turcos en la embarcación que haría parte de su recorrido hasta Toulouse (Francia), ciudad en la que realizó sus estudios de teología. EL cautiverio lo llevó hasta Túnez, al norte de África, allí fue encadenado y paseado por la ciudad para ser vendido al mejor postor.

Esta experiencia se verá reflejada sin duda en la gran preocupación de san Vicente por los presos, especialmente de las galeras (barcos usados como cárceles), que sufren grandes incomodidades, dolores, y la tristeza de su cautividad. Tanto los sacerdotes de la Congregación como las Hijas de la Caridad serán presurosos en el servicio a estos hermanos.

Preguntas:

 ¿Pones con esperanza en las manos de Dios tus problemas y dificultades, o por el contrario, te desesperas y tu fe se debilita?
 ¿Cuáles son las “esclavitudes” que tienes atadas a tu vida en este momento y no te dejan confiar plenamente en Dios como lo hizo San Vicente?

SEXTO DÍA
Roma y París – 1607

Signo: Algunas imágenes alusivas a Roma, un barco, imágenes que representen la ciudad de París, varias velas encendidas y la Palabra de Dios en el centro.

Viajero, no te canses, hemos acompañado a San Vicente al África, su paso por la esclavitud le enseñó muchas cosas, ahora hacemos un viaje muy corto por la ciudad eterna y luego regresaremos a la capital francesa, sigamos con nuestro mapa en busca de ese encuentro de Vicente con Cristo.
Vista de Avignon:

 Canción: "Vicente de Paúl", Ixcís

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto 1 Pe. 3, 12-16

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: El agua de la marea, por estar siempre en reposo, está corrompida, cenagosa y maloliente; por el contrario, los arroyos y las fuentes, que corren con agilidad por entre las piedras y las rocas, son aguas mansas y hermosas. ¿A quién no le gustaría más ser arroyo que ciénaga, aunque sea a costas de tropezar con las piedras? Y no hay que extrañarse de que nos aburran las mismas cosas, ya que estamos compuestos de la misma manera. (XI A pág. 68)

En este sexto día de nuestra novena, y después de la gran prueba del cautiverio y la esclavitud de San Vicente en África, dirigimos ahora nuestra mirada a la capital de Francia: París. San Vicente llega a París a finales de 1608 con el deseo de no tardar allí mucho tiempo, lo que no sabía era que su estancia en la gran ciudad francesa se prologaría por casi toda su vida. Allí san Vicente vivió grandes acontecimientos que marcaron significativamente su vida y su proceso de conversión. Conoció también ilustres personajes como Monseñor de Berulle y San Francisco de Sales, quienes aportaron grandes cualidades a su personalidad. En París san Vicente viviría la acusación injusta y falsa de robo y sus primeros pasos hacia la conversión que transformaría definitivamente su vida.

Después de una corta estancia allí, se dispone a llegar a la capital de Francia: París. No pensaba pasar allí mucho tiempo, pues deseaba encontrarse con su familia después de sus dos años de ausencia inadvertida; lo que no sabía, era que la Divina Providencia tenía planes muy diferentes a los suyos, y sería en esta ciudad en donde su mentalidad cambiaría por completo. Muchas experiencias tuvieron allí su origen, pero la primera, tras su llegada en 1608, no sería la mejor. Corto de dinero, Vicente se hospeda en un hogar sencillo, donde compartía habitación con un paisano suyo, juez del pequeño pueblo de Sore.

Preguntas:

 ¿De qué manera la historia de San Vicente se relaciona a muchos momentos de tu vida personal?
 ¿Cuántas veces tienes sentimientos de tristeza o de crisis de fe?
 ¿Qué has aprendido en estos días de la novena?

SÉPTIMO DÍA
Folleville y Chatillon les Dombes – 1617

Signo: Dos caminos, el primero que haga alusión a Folleville, el segundo camino que haga referencia a Chatillon les Dombes, en uno puede llevar la palabra Misión en el otro Caridad.

Hoy será un día de largo camino, vamos acompañemos a san Vicente en una búsqueda más animosa en medio de los pobres en dos experiencias que en 1617 marcaron definitivamente la vida y vocación de Vicente de Paúl: la confesión del campesino en Gannes – Folleville, y la pobreza y miseria de una familia en Chatillon-les-Dombes, hoy Chatillon-sur-Chalaronne, en Francia. En estos dos lugares, Vicente descubre la voluntad de Dios sobre él: dedicarse por completo a la evangelización de los pobres del campo y a trabajar por la caridad pero una caridad organizada.

 Canción: Amigo Vicente.

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto Lc 15, 4-7

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: ¿Por qué creéis que quiso nuestro Señor que sus discípulos fueran de dos en dos? Porque, al recomendar a cada uno que ejercitase la caridad para con su prójimo y ese prójimo supone que hay una segunda persona, por eso los envió de dos en dos, para que ambos ejercitasen continuamente la caridad entre sí y si uno de los dos caía, hubiera alguien que lo levantase y le animase en sus trabajos, si lo veía cansado y abatido.

(XI A pág 248).

La confesión del campesino en Gannes – Folleville, a quien todos tenían por hombre de bien, honrado y virtuoso y, quien manifestó el haberse condenado si no hubiera sido por aquella confesión, fue para Vicente de Paúl una gran revelación: dedicarse por completo a la evangelización de los pobres del campo. Así son los designios del Señor quien a través de las personas y de los acontecimientos nos enseña su Voluntad y nos muestra los caminos que estamos llamados a recorrer y que nos conducen a la santificación de nuestras vidas. Además, esta confesión del campesino hizo que Vicente predicara el 25 de enero de 1617, en la fiesta de la conversión de san Pablo, el “primer sermón de misión” haciendo un llamado a la conversión; Dios bendijo sus palabras y la gente acudió en masa a confesarse. Qué alegría para todo este pueblo volver su corazón a Dios y encontrar en Vicente y en otros sacerdotes que le ayudaron, el instrumento del perdón y de la misericordia divina.

En Chatillon-les-Dombes fue a través de una familia muy pobre, donde todos sus miembros estaban enfermos, muriéndose de hambre y sin quien los asistiera, que Vicente descubre otro llamado de Dios: dedicarse al cuidado material de los pobres organizando la caridad. Un 20 de agosto de 1617, le informan del estado de esta familia y él dejándose tocar el corazón hizo un llamado a la caridad. Fue tanta la respuesta que la gente iba y venía llevando provisiones a dicha familia. Allí decidió crear las Cofradías de la Caridad (actualmente, la Asociación Internacional de la Caridad: AIC) para que la ayuda a los pobres se hiciera de manera organizada. Qué magnificas ideas revela el Señor a quienes escuchan la voz de los pobres y quienes se movilizan para responder a sus necesidades. Hoy también no solo la AIC realiza una hermosa labor de servicio a ejemplo de Vicente sino también muchas otras Asociaciones y toda la Familia Vicentina se siente llamada a esta gran vocación de servicio, de amor, de generosidad, y de ayuda mutua porque “los pobres nos evangelizan” y continúan mostrándonos el rostro sufriente de Cristo.

Preguntas:

 ¿Busco la confesión y mi propia conversión como el campesino de Gannes?
 ¿Me siento llamado (a) al servicio como lo descubrió y lo hizo Vicente de Paúl?
 ¿Cómo estoy respondiendo o cómo puedo responder a las necesidades de los pobres?

OCTAVO DÍA
Marsella – 1618

Signo: Un barco, imágenes de presos, esclavos, algunas cadenas, también imágenes de la guerra, varias imágenes que demuestren la pobreza.

Caminante, sale Vicente con todo su ímpetu, aún juvenil, tiene 36 años, ha pasado por mucho, pero su espíritu ferviente, ya lo aleja de las pretensiones humanas, ahora camina por todo Francia estableciendo las cofradías de la Caridad, conoce a Santa Luisa de Marillac su gran compañera de misión, y empieza a reunir otros amigos sacerdotes que le ayudarán en su misión, hoy vamos a ir hasta Marsella a 750 kilómetros de París, una ciudad portuaria, donde se encuentran los presos que son obligados a trabajar en grandes galeotes, muchos de ellos sometidos a condiciones infrahumanas. ¿Qué pasará allí?

 Canción: Un amor ardiente a Jesucristo

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto Gal 3, 26-29.

Reflexión:

Escuchemos a San Vicente: Por tanto, ¿quién no ve que la mortificación tiene que ser inseparable de un misionero, no sólo para trabajar con el pobre pueblo, sino también con los ejercitantes, los ordenandos, los galeotes y los esclavos? Porque, si no somos mortificados ¿cómo vamos a sufrir lo que hay que sufrir en todas estas tareas?

(XI B pág. 590)

Siguiendo los pasos de san Vicente, encontramos hoy un dinamismo misionero acompañado por una preocupación hacia todas las realidades de pobreza de su tiempo, y es viendo la realidad de los presos en las galeras, en su viaje a Marsella, donde hay una escena particularmente heroica, donde toma el lugar de uno de esos presos para palpar el sufrimiento en carne propia. Pero no se queda solo con eso, gracias a su gestión ayuda a que esos presos tengan un lugar más digno para vivir y que los sacerdotes de la Congregación los asistan espiritualmente junto con las Hijas de la Caridad.

Y es tanto el fervor que suscita san Vicente que más y más personas se van adhiriendo a ese apostolado en medio de los pobres, se abren cofradías a lo largo y ancho de Francia, Santa Luisa se encarga más adelante de visitarlas, atiende a las víctimas de la guerra en la región fronteriza de Lorena, se preocupa por los niños expósitos o abandonados que son tirados a las calles incluso en épocas de invierno, se conmueve del hambre de los ancianos, del sufrimiento de las madres, son muchas las realidades de miseria, pero él no se detiene.

Preguntas:

 ¿Cuáles son las nuevas pobrezas que tenemos en nuestros tiempos?
 ¿Mi apostolado es dinámico a ejemplo de San Vicente?
 ¿He sido capaz de salir a misión y llevar el Evangelio a otros hermanos?

NOVENO DÍA
San Lázaro – 1660

Signo: Algunas velas, un crucifijo, algunos elementos que recreen la ancianidad, imágenes de la casa de San Lázaro (la antigua)

¿Te acuerdas cuando hace ocho días partimos con San Vicente de Paúl, un niño que dejó su casa paterna para ir a estudiar a una ciudad muy distinta a su pequeño pueblito? Creo que hemos caminado mucho con san Vicente y hemos regresado a su casa en París, llamada San Lázaro, ya no es niño ni joven, ni adulto, tiene 80 años y está en su lecho, pero tiene una sonrisa muy grande porque recuerda con amor todo su trabajo incansable, ven miremos sus recuerdos de sus últimos días.

 Canción: Vicente de Paúl en ti vemos a Dios. 

Iluminación Bíblica: Toma tu Biblia viajero y busca el texto Rom 8, 31-39

Reflexión:

«Yo mismo, aunque ya soy viejo y de edad, no dejo de tener dentro de mí esta disposición, y estoy dispuesto incluso a marchar a las Indias para ganar allí almas para Dios, aunque tenga que morir por el camino o en el barco»

(XI, 281).

Nunca nos deja de sorprender San Vicente, no sólo esa caridad que irradió en todos los hombres y mujeres de su época sino también en los hospitales, orfanatos y escuelas. Su espíritu ferviente, incluso en los últimos días de su vida, fue un largo camino, fueron cientos de miles de kilómetros en busca de Jesucristo, ese que él encontró en la persona de los más pobres, en los vulnerables, en los sencillos de corazón.

Pero san Vicente tuvo una audacia como ninguno: sus amigos los pobres eran atendidos gracias a todas las gestiones que hacía san Vicente con las clases altas y pudientes de su época, fue estimado por el Rey y la corte real, era amigo de los más altos funcionarios, pero sencillo, hasta el hecho de llevar con orgullo su sotana un poco ajada y maltrecha.

Pero llega el momento de despedir a nuestro padre Vicente de este mundo temporal, tendrá una peregrinación hacia la Misión del Cielo, desde allá seguirá bendiciendo y acompañando todas las obras que se le han confiado a su patronazgo, aquí quedamos en su habitación en San Lázaro, mientras lo lloran todos sus hijos e hijas espirituales y nosotros más acá en el tiempo, nos alegramos profundamente de celebrar su fiesta el día de mañana.

Preguntas:

 ¿Qué aprendí en esta peregrinación con San Vicente?
 ¿Cómo quiero pasar el resto de mis días?
 ¿Me siento confiado en que Jesús guiará mis pasos constantemente?

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