El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas terminó su sesión de este jueves sin la aprobación de ninguno de los dos proyectos presentados sobre la situación en Venezuela.
El primer proyecto por el que se votó fue el redactado por EE.UU. y contó con 9 votos a favor, 3 en contra y 3 abstenciones. El presidente del Consejo, el representante de Guinea Ecuatorial, explicó que la resolución no fue aprobado por el voto en contra de un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, veto, de Rusia y China.
El otro proyecto fue presentado por Rusia y tuvo 4 votos a favor, 7 en contra y 4 abstenciones. Tampoco logró ser aprobado porque no tuvo los votos necesarios, indicó el presidente del consejo.
Esta votación llega después de que países miembros del consejo presentaron sus puntos de vistas por segunda vez este año, desde que se agudizó la severa crisis política, económica y social que encara Venezuela.
Este último encuentro del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir el tema venezolano fue convocado por Estados Unidos, cuyo gobierno ha sido clave en conseguir el respaldo internacional para aislar al gobierno en disputa de Nicolás Maduro y respaldar al presidente interino Juan Guaidó.
La resolución de EE.UU. pedía elecciones y acceso de ayuda humanitaria, mientras que la de Rusia solicitaba que se respete la soberanía del país y no se interfiera en sus asuntos internos.
El representante de Rusia, Vasily Nebenzya, indicó que su resolución planteaba una solución a la crisis venezolana “a través del diálogo, un diálogo nacional, de carácter amplio”.
Indicó que la intención de Washington es aumentar la presión para derrocar al gobierno del presidente en disputa Nicolás Maduro. Aseguró que esto no tiene que ver con la política venezolana y por ende es “ilegal” y “es una burla” para los miembros del consejo.
Nebenzya aseguró que Rusia solo quiere ayudar al pueblo de Venezuela y apoyar la entrega de ayuda humanitaria, pero bajo los criterios de “humanidad, neutralidad e independencia”.
“Ustedes están quemando todos los puentes”, afirmó el representante ruso sobre los esfuerzos de EE.UU. para solventar la crisis.
Por su parte, el representante especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, aseguró que quienes votaron en contra de la resolución, “continúan protegiendo a Maduro y a sus secuaces y prolongan el sufrimiento del pueblo venezolano”.
Afirmó que EE.UU. seguirá intentado hacer llegar la ayuda humanitaria a quienes más lo necesitan.
Este mismo jueves, el presidente encargado Juan Guaidó anunció en su cuenta de Twitter que un nuevo avión con más ayuda humanitaria proveniente de Estados Unidos llegó a Cúcuta, Colombia.
Del mismo modo, el secretario de Estado, Mike Pompeo, declaró el jueves que siguen trabajando para que en las próximas dos semanas se pueda ingresar la ayuda humanitaria a Venezuela.
Samuel Moncada, representante de Venezuela, volvió a ratificar lo dicho por el canciller Jorge Arreaza en la sesión del martes: el país se encuentra en paz y el responsables de la inestabilidad y violencia es la injerencia exterior.
Aseguró que el fin de semana lo que ocurrió fueron actos violentos desde territorio colombiano a territorio venezolano. Pidió al Consejo de Seguridad un claro pronunciamiento condenando y prohibiendo la fuerza militar en Venezuela.
División
El presidente de la Comisión le dio el permiso de palabra a los distintos miembros para argumentar su voto.
El representante de China aseguró que su país sigue con atención la situación de la situación venezolana y que apoya el deseo del gobierno de Maduro de mantener la estabilidad y soberanía del país.
«China se opone a fuerzas externas interfiriendo en los asuntos internos venezolanos, y se opone a la intervención militar», indicó el diplomático.
El representante de Sudáfrica aseguró que el diálogo incluyente es necesario para la solución de la crisis venezolana. «Debemos tener una sola voz, ayudando al pueblo venezolano», afirmó.
El representante de Indonesia fue uno de los más duro en sus declaraciones. Lamentó que se haya podido alcanzar unidad. «Este es un día muy triste para la comunidad internacional y para el pueblo de Venezuela. Es un fracaso colectivo”, sentenció.
Aseguró que ambos proyectos estaban «incompletos» y «politizados» y no daban la posibilidad de que se llegue a un consenso. Pidió por más equilibrio y más consulta.
El representante de Perú explicó que votó a favor de la resolución de EE.UU. para que se pudiese adoptar una decisión sobre la seguridad y estabilidad de la región.
Calificó la situación del país sudamericano como “una amenaza sin precedente” para la paz, estabilidad y libertad de la región. Indicó que la resolución rusa no toma en cuenta los elementos básicos del problema en Venezuela ni la violación de los derechos humanos.
Bélgica también votó a favor de la resolución de EE.UU., explicó su representante, porque contiene los elementos esenciales para salir de la crisis venezolana: unas elecciones creíbles, seguridad de los venezolanos y la ayuda humanitaria. Aseguró no hay nada en el texto que justifique una solución violenta, como afirman quienes se opusieron.
Por su parte, República Dominicana aseguró que la única solución para la crisis que atraviesa el país sudamericano son unas elecciones libres y competitivas, con garantías para todos los actores.
La representante de Reino Unido aseguró que el hecho de que la resolución de EE.UU. haya sido «objeto de veto, y no rechazado» muestra el sentimiento de los estados miembros sobre la situación venezolana, pues el texto reconoce la crisis que atraviesa el país.
Sobre las acusaciones de los representantes de Venezuela al bancos británicos haberle bloqueado dinero del Estado, afirmó que “si el robo y saqueo está ocurriendo es por su propio gobierno”.
El representante de Francia lamentó los dos vetos y aseguró que la resolución de EE.UU. habría podido contribuir a la solución del sufrimiento del pueblo venezolano.
Aseguró que el texto no constituye ni una base jurídica para el uso de la fuerza, ni un intento para violentar la soberanía venezolana.
Indicó que es responsabilidad del Consejo de Seguridad condenar el impedimento de la entrada de la ayuda humanitaria y la violencia hacia civiles. Afirmó que la opción rusa no presenta ninguna solución a la crisis.
